¡Hola! ¿Cómo estás?
¿Qué preferís, una economía estable o una sociedad democrática? Buenas noticias: no tenés que elegir, porque no hay tradeoff.
Hoy escribí sobre como las democracias suelen generar crecimiento económico.
Espero que te guste. Gracias por leer.
Las preguntas de hoy
¿La democracia genera crecimiento?
Los seguidores más fieles de este espacio se van a sentir decepcionados por segunda vez consecutiva. Los que leen todo, hasta el final, hasta el “En el próximo envío” (sección que a partir de hoy se va a llamar “Lo que viene, lo que viene”, referenciando a cierto programa televisivo que gente, digamos, vieja recordará), están esperando ansiosamente que escriba sobre Chatbots, que es lo que vengo prometiendo hace dos envíos (saludos a mi amiga Ari) y hace dos semanas que los vengo defolteando. Pero, bueno, vos viste como es esto.
Cuestión que los sobre-escolarizados de Twitter, socialdemócratas, centristas, militantes del establishment (o sea, digamos, gente como uno) están preocupados por la democracia del mundo. No es nueva la precupación, eh, pero se viene profundizando. Y motivos para preocuparse no faltan: es evidente que la democracia es cada vez menos atractiva; a la gente no le parece tan importante vivir en democracias plenas como le solía parecer en el pasado.
Mirá que simpático el grafo de arriba (sale de un paper que aún no sacamos, pero va el adelanto). Es un índice basado en encuesta de, bueno, todo el mundo, que mide “apoyo a la democracia” (basado en preguntas del tipo “pensás que la democracia es el mejor sistema posible?). Está normalizado para que el promedio sea 0. Entre 2005 y 2024 cayó algo una barbaridad (para los que quieran ponerte técnicos: un 25% de una desviación estándar; para los menos técnicos: una parva). Estamos en problemas.
Hace unos meses escribí sobre la disposición que tiene la gente (cada vez más, parece) a tradear valores democrático-liberales a cambio de alguna recompensa material. ¿Cuánto autoritarismo estás dispuesto a bancarte por unos puntitos más de salario? Si te prometo 5 puntitos más de PBI per cápita, ¿estarías dispuesto a que tu gobierno (el que sea), censure algún medio? ¿Y si son 10 puntitos más? 20? Jodida la decisión, ¿no? Parafraseando a Darín en Nueve Reinas: autoritarios sobran, lo que faltan son financistas.
Pero no te preocupes porque acá viene la solución a todos tus problemas. Escuchame una cosa: cuando a vos te vengan a preguntar si preferís democracia o crecimiento, vos hacés lo siguiente. Primero lo mirás fijo. Luego, de a poquito levantás tu celular, lo llevás hasta más o menos la mitad del pecho, estirás la mano, bajás un toque la mirada sin se de cuenta tu interlocutor: venís a este post que estás leyendo, le das tu celular y le mostrás el meme de abajo.
Lo mirás a los ojos (que no te corresponden, porque están apuntando al celular que le diste), sonreís, le guiñás un ojo, te das vuelta y te vas ni bien empieza a sonar el estribillo de "Can't Hold Us" de Macklemore y Ryan Lewis sin dejar de sonreír, al ritmo de la música. Caminás dos pasos cortos hasta que la música se frene de golpe. Te das vuelta, le sacás el celular a tu interlocutor de la mano, esperás a que Macklemore suene de nuevo y, ahora sí, te vas caminando de a pasos amplios, en el sentido contrario a la dirección en la que mira tu interlocutor.
Por si no se entendió: no tenés nada que elegir, porque la democracia trae crecimiento.
Te lo el pensamiento: “bue, es al revés: el crecimiento económico genera democracia”. También puede ser. No lo niego y de hecho es una de las grandes teorías de una parte importante de la ciencia política, empezando por el prócer de la disciplina Seymour Martin Lipset. Puede ser. Y también puede ser que haya una tercera variable (por ejemplo, la cultura que tiene cada sociedad) que explique simultáneamente que un país sea más democrático y que crezca más rápido.
El paper de hoy no niega nada de eso, pero se concentra y encuentra un mecanismo causal en una dirección particular: de democracia a crecimiento. Y no, no hace un experimento. Estaría muy bueno desde el punto de vista metodológico (le doy democracia a unos Estados y no a otros y vuelvo en unos años a ver quién creció más) pero más allá de las dificultades de implementación creo que no pasaría (casi) ningún comité de ética.
Empiezo por un facto. Si promediás la tasa de crecimiento anual del PBI per cápita para todos los países del mundo que alguna vez en su historia pasaron de autocracia a democracia, vas a ver que en general pre-evento democratizador, el crecimiento viene bajando, luego el país se democratiza y el crecimiento vuelve a acelerarse. Este facto nos sugiere una respuesta: pareciera ser que post-democratización los países crecen más, pero no alcanza esto para establecer una relación causal. Se me ocurre una historia alternativa que sería consistente con el patrón que describí arriba: cuando un país se empieza a estancar, la gente se empieza a manifestar y eso acelera una democratización. Cuando un país se empieza a estancar, también es probable que con o sin democratización haya una reversión a la media. Un rebote, bah.
En este espacio ya hablamos de variables instrumentales. Es de los conceptos que más difíciles se me hacen para explicar, así que te voy a referenciar al envío correspondiente (acá), pero también te voy a dar una breve idea aplicada al caso particular del envío de hoy. Que un país se vuelva democrático depende de factores que vamos a llamar “endógenos” (según la RAE, y no está mal: “que se origina en virtud de causas internas”) y otros que vamos a llamar “exógenos” (la RAE dice “de origen externo”). Por ejemplo, un país que está en plena dictadura puede volverse democrático porque un cambio demográfico hizo que la población se vuelva más joven y por ende más propensa a protestar. Ese factor es “endógeno” en este caso, porque una población más joven no solo genera democratización sino posiblemente crecimiento. ¿Cómo sabemos si el crecimiento se dio porque se democratizó el país o se hubiera dado igual (aún en dictadura) simplemente porque la gente más joven produce más?
Por suerte también hay factores “exógenos”. Acemoglu y sus coautores (quienes escribieron el paper que motiva este envío) encontraron lo que podemos llamar “oleadas de democratización regional”. O sea: la probabilidad de que un país se democratice en un año determinado depende fuertemente de la democratización de sus vecinos en años previos. Ejemplo: la probabilidad de que Chile se democratice en 1989 depende de factores internos (endógenos), pero también de si los otros países de Sudamérica se democratizaron antes (Argentina, 1983; Brasil, 1988, etc.). Si me creés que la democratización de Argentina, Brasil y otros de la zona afectó la probabilidad de que Chile se democratice unos años después pero no afectó de forma DIRECTA la tasa futura de crecimiento chileno, entonces la variable “mis vecinos se democratizaron en el pasado” es una variable que captura solamente la parte “exógena” de la democratización chilena y por lo tanto es lo que llamamos un buen instrumento. ¿Por qué es un buen instrumento? Porque nos permite quedarnos solamente con los motivos exógenos (externos) que explican los procesos de democratización y estudiar como esa partecita que extrajimos explica (ahora sí) causalmente a la variable que nos interesa crecimiento.
Te estarás preguntando cómo se mide la democracia. Un poco ya hablamos de esto acá, pero te recuerdo un poco de qué va la cosa. Lo primero: desde ya te aclaro que ninguna definición te va a dejar contento. “Democracia” es un concepto complicado y más aún es cuantificarlo. Hay varios índices que politólogos y economistas suelen usar: Polity, Freedom House, V-Dem. Normalmente estos índices no son 0 o 1, sino que tienen categorías o incluso se expesan en un continuo (por ejemplo, un valor 0 a 100 puntos de democracia). Finlandia seguramente sea en todo momento perfectamente democrática, Corea del Norte seguramente sea en todo momento perfectamente autocrática, Argentina tendrá períodos perfectamente democrática, otros perfectamente autocrática y otros ni muy muy ni tan tan.
Y si hilamos fino, la cosa se pone aún más compleja, porque “democracia” podría medirse en diferentes atributos (por eso “V-Dem”: Varieties of democracy); uno podría hablar de una democracia electoral que no es una democracia liberal, o de una democracia liberal pero que no es una democracia suficientemente deliberativa, o participativa.
Mirá el gráfico de arriba (que en realidad viene de este paper) y compara a España con Argentina desde 1900 a la actualidad, en su calidad democrática. La variable en rojo oscuro mide democracia como una variable binaria (democracia si o no) y es una combinación de un montón de diferentes atributos que generan un puntaje y en función de ese puntaje se clasifica como democracia o no-democracia. Los diferentes colores tienen puntuaciones de diferentes atributos democráticos. Por ejemplo, en cuanto al componente “liberal” de la democracia, España está por arriba de Argentina, aún si ambas califiquen en promedio como democracias según la variable binaria.
Acemoglu usa un montón de definiciones diferentes para mostrar que sus resultados no cambian mucho cuando cambia la definición, pero los resultados que te voy a contar corresponden al índice binario que ves arriba.
Ahora sí, vamos a los resultados.
En promedio, los eventos de democratización (pasar de no-democracia a democracia), aumenta el PBI per cápita en un 25% en los 25 años que le siguen al evento, en comparación con un contrafactual en el cual la no-democracia hubiera seguido su curso.
Siguiente pregunta: ¿por qué? En teoría, no es nada obvio que una democracia tenga que crecer más que una autocracia. Acemoglu y compañía muestran que probablemente las democracias crezcan más porque, en promedio, hacen mejor “la tarea” que las autocracias. Post-democratización los países son:
Más propensos a implementar reformas económicas (o sea, salir del status quo). Y más proclives a estar abiertos al comercio, cosa que suele ser muy estimulante para el crecimiento.
Aumentan la recaudación. Esto último no es per se algo bueno, pero si los fondos públicos están bien invertidos, es esperable que fomenten el crecimiento. Consistente con esto, la inversión en democracias es más alta .
Bajan el conflicto. En democracia hay menos disturbios y esto es un resultado que a mí no me parece tan esperable y que es un gran catalizador de crecimiento.
Pará, pará, pará. ¿Vos me estás diciendo que no necesitamos perder libertades para crecer más? ¿Y entonces por qué la gente demanda gobiernos cada vez menos republicanos esperando que le arreglen la economía? Ajá! Dame unas semanas (ojalá que pocas) y te cuento.
¿Sabés que estaría más bueno que comerte un buen Vitel Toné en navidad? Es una pregunta capciosa, porque el Vitel Toné es una de las grandes tragedias de la humanidad. No te voy a venir con esa boludez tipo “ahh si es tan rico por qué no lo comen todo el año” porque es un pésimo argumento: hay cosas que tenés ganas de comerlas en ciertos momentos y no en otros. Ahora bien, el Vitel Toné es una desgracia 24x7 los 365 días del año. Pensalo un segundo: está hecho con peceto. ¿Qué persona en su sano juicio elegiría peceto como corte de carne en el país de la carne, si no es para hacer una milanesa o como método de tortura? Innecesario pero aún más innecesario es ponerle 2 kilos de mayonesa. ¿Por qué la gente en el cono sur come tanta mayonesa en navidad? Hay 48 grados y 252% de humedad, tenés carne de calidad y barata a disposición: festejá con asado, man, qué tanto. Con seguridad, pero con certeza absoluta, te puedo decir que compartir este envío estaría mejor que comerte un Vitel Toné en navidad.
Ahora, si sos tan rata que no podés compartir, por lo menos likea el post ahí arriba (rata).
Ah y dejame tu mail si aún no lo hiciste:
Te puede interesar
El paper de hoy lo encontrás acá.
Hace poco salió un paper muy bueno mostrando que los populismos (tanto de derecha como de izquierda) generan peores resultados económicos. Lo ves acá.
Acá tenés el paper al que me referí arriba mostrando que las democracias exitosas generar su propio apoyo. Y acá está el post alusivo.
Nada que ver, pero …
Muy bueno esto: usás LLMs en vez de Google y terminás aprendiendo menos.
Relacionado, acá hicieron un experimento. Sacar internet del celular por un mes te hace más feliz y más “attentive” (o sea, menos boludo).
En este paper muestra que el Brexit aumentó la probabilidad de que los british internados se mueran (pensá cuántos profesionales de la salud son extranjeros).
¿Suerte o mérito? Acá midieron en 60 países las creencias sobre qué es más derminante para explicar la desigualdad.
Lo que viene, lo que viene
“La clave para hacerte rico“. Bro, ¿querés ser rico? No necesitás lenvatarte 4 AM, ir al gimnasio y estafar gente. Es más fácil: estudiá economía. La próxima semana te cuento por qué estudiar economía puede ser una buena inversión (no se guíen por los académicos, esos seguimos siendo pobretones).
Creo que tiene más que ver con la institucionalidad que con la democracia; y simplemente se da que, por motivos obvios, las instituciones tienden a ser más respetadas en sistemas democráticos. Sumado más que nada a lo que mencionaste de Acemoglu. China por ejemplo es recontra anti-democrático, pero las reglas del juego las tiene perfectamente claras y muy rara vez las tocan.
También aplica el tema de qué incentivos tiene uno para operar. La gran mayoría de dictaduras tienen todos los incentivos para hacer las cosas "mal". Desde que políticamente conviene plantarse contra el libre comercio/capitalismo/lo que sea para tener un enemigo creíble hasta que la gente que te puede sacar es menos gente con más poder concentrado así que estás forzado casi sí o sí a jugar más para ellos. En dictaduras (o mejor dicho "no democracias") que funcionaron de forma más ordenada (ponele Pinochet, el PCC o la mayoría de gobiernos exitosos pre-sufragio universal), generalmente pudieron alinear los incentivos de que a los gobernantes les vaya bien con los de que al país (o a suficientes sectores del mismo) les vaya bien. Los chinos no te desaparecen a un político por no aceptar coímas, sino que tienden a operar al revés; casi lo opuesto a los narcoestados de latam.
Igual fuera de todos los estudios que se hacen al respecto, me parece que cada vez queda más reivindicado Platón con su: Monarquía buena > Democracia Buena > Democracia Mala > Monarquía Mala. (Y como no tenés mucha forma de asegurar una monarquía buena, generalmente conviene tirarle al lado democrático).
Excelente post. Y lo del Vitel Toné es real. 100%. Aguardo la réplica de qué pasa con el republicanismo. Abrazo!